Financiación pública

Refinanciamiento de deudas

la mejor solución para resolver las deudas

Empresas y Autónomos

Qué es la financiación pública

Este tipo de financiación externa recibe los fondos de una organización o institución pública, que en este caso del Estado Español. Esta financiación hace la función de impulsar las metas estratégicas de las empresas, mayoritariamente públicas, pero en algunos casos, empresas y organizaciones privadas pueden aspirar a conseguir esta financiación pública.

Una de las “ayudas” más comunes de la financiación pública son las subvenciones, que son consideradas ayudas económicas que no se tienen que devolver, mientras que el resto de líneas y fuentes de financiación públicas que se detallarán en este artículo sí que suponen la devolución del capital prestado, aunque estas líneas de crédito son mucho más ventajosas para el deudor y el proyecto empresarial en cuestión. Es por ello que, contemplar la posibilidad de decantarse hacia un tipo de financiamiento público será mucho más confiable y rentable que acogerse directamente a una línea de crédito privada.

Este tipo de financiación supone una ventaja y un sinfín de oportunidades para perfiles emprendedores: startups, y proyectos de empresas que presentan riesgo, pero un potencial de crecimiento innegable.

Existen fuentes de financiación públicas tanto a nivel regional, como nacional e internacional. Para la deliberación de la financiación pública a diferentes proyectos de innovación, digitalización, internacionalización e investigación (áreas de interés y crecimiento en el país) en ámbito nacional y regional, los diferentes

Fuentes y entidades

Financiación pública en España

Las fuentes de financiación públicas más destacadas en el ámbito nacional son las siguientes:

NEOTEC: Es una iniciativa impulsada por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), que persigue dar soporte a la creación y consolidación de empresas principalmente tecnológicas. Las empresas que buscan son de tipo EBT, es decir, que basan su actividad de negocio en el puro dominio del conocimiento científico/técnico. Para la financiación NEOTEC no se contemplan las empresas cuya estrategia se basa en servicios a terceros, sin el uso de tecnología propia. Este programa lleva vigente desde el primer año que se aprobaron sus primeras ayudas, en 2002, llegando a prestar hasta 1.000.000 de euros reembolsables. La ventaja del programa es que se retornaban los préstamos sólo cuándo la empresa fuese capaz de generar cash flow positivo, en calidad de cuotas anuales idénticas por un periodo corto de tiempo. Hoy en día, el programa NEOTEC lleva más de 600 proyectos aprobados, generando una aportación pública de hasta casi 500 millones de euros. Sus convocatorias son anuales.

ENISA: Es la fuente de financiación pública de referencia para empresas medianas y pequeñas. Un proyecto presentado a Enisa es susceptible de ser aceptado si es innovador, sostenible y viable económicamente, y para eso, se somete a un complejo proceso de análisis y validación por parte de los analistas del programa. Enisa ofrece financiación mediante la concesión de “préstamos participativos”, sin la necesidad de solicitar garantías o avales, gestionándose así un plan de viabilidad excelente. A cambio, Enisa formará parte de los beneficios de la empresa reclamando una participación junto con el cobro de unos intereses vinculados a la capacidad financiera de la empresa deudora.
HORIZONTE 2020: Es un programa de la Unión Europea que persigue incentivar la capacidad y competencias de investigación e innovación de todo el territorio europeo. Su gran ventaja es que cualquier tipo de organización (pública o privad) puede solicitarla, siempre que la dirección social se encuentre dentro de la unión europea, y siempre que el proyecto se dedique a campos típicos del I+D que comprenderían investigación básica, desarrollo, creación y mantenimiento de tecnología, innovación social y demás. La participación a una convocatoria de este programa requeriría una propuesta del proyecto y de documentos específicos. Horizonte 2020 concedería a los proyectos ganadores un tipo de subvenciones a fondo perdido que cubrirían hasta el 100% de los costes elegibles del proyecto.
HORIZONTE PYME: Es un programa gestionado por el Ministerio de Economía y de Competitividad, siendo administrado el préstamo por la Subdirección General de Colaboración Público-Privada de la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación. Su objetivo es financiar un estudio de viabilidad a las empresas potenciales con innovación de proyectos que no lograron hacerse un hueco en la subvención previamente ofrecida en el anterior programa, el Horizonte 2020. Deberán haber obtenido el “seal of excellence” de ese programa, otorgado por la Comisión Europea. Podría llegar a significar una dotación máxima de casi 4.000.000 €, dependiendo de la categoría de proyecto del que se tratase.
CRÉDITOS ICO PARA STARTUPS: Esta financiación está exclusivamente configurada para pymes y autónomos que deseen arrancar con su proyecto y que necesiten de financiación, gestionado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO), que es una entidad financiera pública ligada al Ministerio de Economía y Competitividad, de la misma manera que en el programa de Horizonte Pyme. ICO trabajaría con los proyectos elegidos usando líneas de mediación de crédito con entidades de banco, siendo estas últimas las que asumirían el riesgo de la inversión financiera. El crédito total, podría llegar a ascender hasta 12.500.00 €, pudiendo ser de diferentes modalidades, como el préstamo, renting, leasing y línea de crédito.

Diferencias

Financiación pública y privada

Principalmente, la diferencia entre ambas opciones son la fuente del financiamiento. El financiamiento público vendría otorgado por el Estado del país en cuestión o por una organización mucho más grande, como la Unión Europea. El financiamiento privado sería aportado por las entidades de crédito que se dedican a buscar una rentabilidad económica en sus prestaciones, como los bancos.

Pero hay mucho más que diferencia ambas opciones que se consideran importantes y a tener en cuenta a la hora de decantarse por un tipo de financiación.

Interés del préstamo: El interés que generaría un préstamo otorgado por la financiación pública rondaría entre el 0% y el 1,5%, tomándose de base el Euribor. La financiación privada significaría un interés mucho más elevado, que dependería de muchos factores.
Carencias: Los préstamos que otorgan los medios privados no tienen un tiempo de margen para el pago de su importe. En cambio, el financiamiento público sí que goza de este período, llegando hasta 3 años desde el inicio del proyecto.
Anticipos: La financiación pública permite al deudor un anticipo del préstamo que le permitirá pagar a terceros en la consecución y consolidación de la fase inicial de su proyecto.
Tramos no reembolsables: Sólo la financiación pública permitiría que un porcentaje fijo no fuera devuelto por la empresa deudora, oscilando entre el 5% y el 33%.
El CIRBE: Es la lista de instrumentos financieros que figurarían por riesgo. En la financiación privada si que figurarían esas empresas hasta que consiguieran sobrepasar el punto muerto de sus costes y beneficios, y en la pública no.
Sellos y certificados: Con la financiación pública, es muy posible obtener certificados de actividad I+D, que podrían resultar en deducciones de hasta el 40% del préstamo.
Cuantía mínima del préstamo: En la financiación privada no existe cuantía mínima para formalizar un contrato de préstamo. En cambio, en la pública el proyecto debe ascender a más de 100.000 €.
Auditorías: El proyecto con financiación pública deberá ser auditado por ROAC. La comunicación entre entidades deberá ser muy frecuente y transparente, viéndose un gran nivel de control de la actividad, cuentas y beneficios de la empresa. En el caso de la financiación privada, no existiría la necesidad de auditar a la empresa ni de pedirle información existencial de su actividad de negocio, mientras que se cumplan los términos del contrato de la línea de crédito.
Obtención del crédito: En la vía pública, el dinero se obtiene al cabo de 2-3 meses de la formalización del contrato. En la financiación privada, al cabo de pocos días ya se recibe.

Beneficios

Ventajas de la financiación pública

Recordamos que la financiación pública goza de un tipo de interés menor al de las entidades de crédito privadas, los proyectos elegidos no formarán parte de la lista del CIR, se podrá disfrutar de un período inicial de carencia de pago, se disfrutarán de porcentajes no reembolsables dependiendo de la situación de la empresa en cuestión y, finalmente, cualquier empresa podría presentarse a dichas convocatorias de las entidades de préstamo públicas, siempre que elijan bien a cuál de ellas presentarse ya que una gran parte de ellas perseguiría los proyectos de obtención del conocimiento, innovación y tecnología.

En Solventian estamos por ti, para ayudarte a tener un futuro mejor

Contacta ahora mismo con nosotros, cuéntanos tu situación, y te asesoramos sin compromiso.